Ha de tomarse un comprimido en desayuno, comida y cena. Si solamente se toman dos, eliminar el de la comida.

Semanas antes, durante y, al menos, un mes después de los tratamientos de quimioterapia se ha de aumentar la dosis a 3 diarios debido a su demostrada efectividad junto a los tratamientos con citostáticos: Aumenta sus efectos positivos reduciendo los adversos.

En cápsulas. Hay en el mercado este tipo de complementos, tanto de arándano rojo (cranberry) como del "azul" (blueberry). Sin embargo, en los procesos de manipulación las pérdidas en polifenoles y vitamina C, son especialmente significativas.

Se ha de tener en cuenta que los nutrientes en ambos tipos de arándanos son distintos. De hecho, la proantocianidina (PAC) que contiene el rojo es del tipo A (hoy día solo se conoce en este fruto) y del tipo B en los azulados. Dada la importancia de la primera, por su actividad y capacidad de penetración, y teniendo en cuenta su escasez se recomienda tomar complementos de cápsulas de este tipo de arándano. Tómese una cápsula (conteniendo unos 40mg de PAC) por comida.

Actualmente, los tres complementos dietéticos indicados pueden ser adquiridos en herbolarios y oficinas de farmacia.

Otros complementos dietéticos importantes , aunque comercialmente poco extendidos, son el hidroxitirosol (aceituna negra y aceite de oliva virgen) y el kempferol (remolacha roja y té verde). Deben tomarse cotidianamente. En preparados es fácil tomarlos una vez en cada comida, algo, como en la remolacha, que a veces resulta complicado seguir mediante la dieta.

NUTRIENTES EN LA DIETA

Es en 1973 cuando se publica por primera vez que este oligoelemento actúa preventivamente contra el cáncer. Su acción reside en la activación que ejerce sobre la enzima glutatión peroxidasa.

A principios de los años 80, los trabajos orientados al estudio de la relación de la vitamina A y el cáncer conducían a conclusiones distintas. Fue a finales de 1981 cuando se pudo discriminar que el betacaroteno, que es provitamina A, previene contra el cáncer. Sin embargo, la vitamina A carece de esta cualidad.

Al betacaroteno se le conoce también como vitamina A vegetal. En tablas de alimentación, cuando se indica el contenido de vitamina A en un vegetal ha de interpretarse como contenido de betacaroteno (b-caroteno en terminología bioquímica).

Son muchos los que están siendo objeto de estudio, desde 1997, para conocer su comportamiento frente a las células cancerosas. Ensayos realizados "in vivo" e "in vitro" han puesto de manifiesto su comportamiento favorable; e incluso las grandes diferencias entre distintos polifenoles.

Los polifenoles son hidro y liposolubles. Por ser hidrosolubles el organismo los elimina fácilmente. Por ello, es preferible hacer pequeñas tomas distribuidas que la misma cantidad concentrada.

Actualmente (2007) se conocen más de 5000 polifenoles. De ellos, se consideran comestibles unos 3000. En esta dieta se ha decidido destacar solo unos pocos:

Resveratrol, quercetina, hidroxitirosol, kempferol y la proantocianidina tipo A. Se ha preferido presentar a los antocianos como grupo.

Es un polifenol cuyo descubrimiento de sus propiedades contra las células cancerosas representa un hito importante en la alimentación contra el cáncer.

Aunque ya en 1995 se descubre su capacidad de prevenir el cáncer, es en 1997 cuando, en la universidad de Illinois, en Chicago, se descubre que también actúa contra las células cancerosas en sus fases de promoción y desarrollo. A partir de la difusión de este trabajo proliferan los estudios sobre polifenoles y cáncer.

Es este un polifenol presente, en cantidades importantes, en cebollas moradas y manzanas. Su notoriedad reside en que estudios realizados y publicados en el año 2000, demostraron la gran incidencia que en los tratamientos de quimioterapia ejercía. En algunos casos, se incrementaban los efectos beneficiosos en un 400%, dependiendo del citotóxico utilizado y de las cantidades ingeridas. Al mismo tiempo se reducían ostensiblemente los efectos adversos.

Destacamos este polifenol por tener una gran importancia en la dieta mediterránea, ya que se encuentra disuelto en el agua y aceite de la aceituna negra. En la extracción del aceite, gran cantidad de este polifenol se pierde, por encontrarse disuelto también en la parte acuosa, el alperchín. Hay proyectos en desarrollo con el objetivo de evitar esta pérdida (Universidad de Granada). Se considera que es el principal antioxidante responsable de alguna de las propiedades beneficiosas para la salud del aceite de oliva virgen.

Este polifenol es un flavonol, grupo que forma parte de los flavonoides, y con escasa presencia en la alimentación española. La remolacha morada es, fundamentalmente, el alimento donde se encuentra. El té verde, cada vez más presente en España, también lo contiene.

Estos polifenoles pertenecen al grupo de los flavonoides y son los responsables de las coloraciones rosa, rojas, malva, azul y moradas de las frutas, hojas y flores.

Refuerzan los vasos sanguíneos al reducir su fragilidad.

En esta dieta, los antocianos han sido considerados como grupo de nutrientes. Se destaca que, algunas frutas que los contienen, como las moras, cerezas oscuras, grosellas negras y arándanos, constituyen un grupo de alimentos muy ricos en polifenoles, tanto en cantidad como en variedad. Esta observación facilita la identificación de alimentos con alto contenido en polifenoles.